Hace semanas atrás, confesé mi pequeño temor por las arañas, creo que ahora es el momento de confesar mi gran temor... me aterran las alturas, al punto de no poder mirar para abajo al subir las escaleras de la facultad y mirar por el huequito del medio por donde muchos escupen. Subir a cualquier juego mecánico de cualquier parque de diversiones es toda una odisea que debo afrontar para no quedar como un cagón, pero siento como si en ese momento mi vida estuviera por acabar.
Subir a una aerosilla la cual me tocó sufrir en Bariloche, pero que solucionaba el miedo cerrando los ojos. Me jode asomarme a un balcón y mirar para abajo.
¡Pero no se puede vivir así!
Encima hace unos años a mi papá le agarro una especie de locura por volar en parapente y quería que tuviera mi vuelo de bautismo obvio que con el instructor abajo o arriba.
Ja, ya mismo me subo a un parapente...
Hoy escucho: Valeria Lynch - Me Das Cada Día Mas
# Escrito por Clarkson @ 13:31
